5 Errores en comunicación interna
A continuación, analizamos los cinco errores más comunes que se comenten a la hora de gestionar la comunicación interna en la empresa.
La comunicación es una herramienta que no está bien utilizada en muchas organizaciones, es como un diamante en bruto, si lo cuidamos podremos sacarle todo el valor, pero si no, puede ir en contra de nuestra imagen y acabar perjudicándonos. Cuando hablamos de comunicación interna, no hablamos solo de un problema del departamento de recursos humanos. Muchas empresas pequeñas carecen de un departamento como tal, entonces, ¿quién debe asumir ese rol?
La respuesta no es fácil, pero podemos comenzar por establecer un plan de comunicación interna: objetivos, público al que me dirijo, canales, acciones y medición de los resultados. De esta manera se da menos margen al error, sin embargo, éstos pueden cometerse.
A continuación, analizamos los cinco errores más comunes que se comenten a la hora de gestionar la comunicación interna en la empresa.
Conflicto entre departamentos
Véase aquí la ironía. Estamos hablando de comunicación, de la transmisión de mensajes entre un emisor y un receptor. Pues bien, este hecho tan aparentemente simple, en muchas ocasiones y cuando se trata de comunicar, no se produce. Falta de sintonía, de puntos de vista comunes, de rivalidad… son varios los motivos que enfrentan a los departamentos de las organizaciones, a la hora de definir quién es el encargado de capitanear el buque insignia de la compañía. Y este es un error muy común que, aunque parezca mentira, se da dentro de hasta las mejores empresas del sector de la comunicación.
¿Quién maneja la Comunicación Interna: RRHH, Marketing, dirección…?
La comunicación es cosa de todos, lo importante es que esté vinculada y alineada con la estrategia de negocio y cultura de la organización. Comprender que lo importante no es quien la maneja, sino que exista. Cuando no existe una Comunicación Interna Formal, existirá una informal. Da igual el canal, pero el rumor se expandirá, haciendo daño. El impacto se traduce en deterioro del clima laboral, o pérdida de talento…
Solo preocuparse de informar
Una campaña de comunicación interna es una poderosa herramienta de influencia sobre los empleados. Calibrar y calcular el impacto que se quiera provocar en éstos, es otro de los puntos a tener en cuenta. ¿Qué quiero conseguir? ¿Hacia dónde les quiero encaminar?
En la gestión de personas ya no solo nos vale informar.
Ignorar la presencia y participación del trabajador
Podemos comunicar mucho, lanzar mensajes con impacto, tener un equipo dedicado a la comunicación interna, hacerlo por diversos canales… pero si en este proceso no involucramos al trabajador, el otro eslabón de esta cadena, todo el esfuerzo no sirve de nada.
Asumir que la escena ha cambiado, que los empleados son parte activa, y que hay tenerlos en cuenta para alcanzar la máxima efectividad posible, es ya un hecho. La comunicación es bidireccional, en definitiva, si somos capaces de escuchar y ser escuchados, seremos empáticos y nuestros mensajes serán aceptados de mejor manera.
Anclarse en el pasado
Si queremos llegar a los empleados y motivarles para que participen debemos replantear la estrategia de comunicación empezando por analizar los canales principales de comunicación interna. Éstos están cambiando; si queremos provocar el cambio debemos hablar el mismo lenguaje que nuestros empleados y estar presentes en los mismos canales que usen.
Lo malo también se cuenta
Es más fácil gestionar desde el silencio. Los mensajes positivos se cuentan de manera automática, en cambio los negativos no. Es vital la transparencia, y la humildad, te hace más auténtico. Cuando se reconocen los errores y se da la opción de preguntar, también se teme por la generación de expectativas. Pero si somos capaces de afrontarlo de la forma más clara y sencilla posible tendremos empleados más comprometidos, y una comunicación interna eficaz, que son, en definitiva, de los objetivos más buscados.
En definitiva, la comunicación interna es hoy más que nunca una importante herramienta para mantener unido al equipo. Si quieres seguir descubriendo más contenidos que te ayuden a mejorar las buenas prácticas con tus empleados, existen multitud de eventos online gratuitos y webinars que tratan este y otros temas, una buena forma de no perder el hilo y mantenerte al día.